Las empresas que han apostado por la Transformación Digital no pueden permitirse tener desconectada su planta de producción o sus delegaciones, que los equipos en la oficina o en movilidad no puedan acceder a sus herramientas y archivos, o que una caída de la web desvíe a su clientela a la competencia. La conectividad es un recurso tan crítico para las PYMEs como la electricidad. Analizar las propuestas con detenimiento y mantenerse con pies de plomo ante los «fuegos artificiales» de la publicidad, es fundamental para acertar con la solución de conectividad para tu negocio.
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Existen muchos criterios para decidir una compra; guiarte sólo por el precio, no es el mejor de ellos. En ocasiones, los paquetes cuyo principal gancho es un importe demasiado atractivo, se basan en soluciones que difícilmente se ajustan a los requerimientos de las organizaciones, con funciones que exceden de lo que realmente necesitan o que apenas cumplen con lo más básico. Así, no es extraño que esa factura aparentemente demasiado asequible vaya engordando hasta más allá de lo previsto a medida que se incluya un respaldo automático, seguridad gestionada, un sistema de monitorización avanzada… Todas las empresas son distintas, y sus necesidades de conectividad, también.
Un recurso crítico como la conectividad exige un análisis previo por parte de personal especializado, contar con una solución a la carta, una infraestructura de primer nivel y con herramientas testadas y efectivas para cada una de las funciones. Así, el trato cercano y personalizado se vuelve vital para lograr la confianza necesaria entre una organización y el operador. Dejar de ser un simple proveedor para pasar a ser un partner a quien plantear posibles escenarios y con quien encontrar soluciones para nuevos desafíos es fundamental para las empresas para las que la conectividad es un recurso estratégico.
El trato cercano y personalizado se vuelve especialmente relevante en los casos en los que algo no funciona como debería. Conseguir una disponibilidad del 99% es posible; del 100% técnicamente imposible. En esos momentos es crucial contar con un trato directo con el soporte técnico y que éste esté debidamente cualificado. La diferencia entre recurrir a un call center con personal de alta rotación y hablar con una persona que conoce tu organización, está especializada en las soluciones que has contratado e invierte tiempo en formarse continuamente, se traduce en miles de euros que tu empresa dejará de perder.
Probablemente el departamentos comercial de tu organización sea capaz de hacer «magia» para recuperar las pérdidas ocasionadas por tener paradas las máquinas durante varias horas, aisladas las delegaciones, o los equipos de brazos cruzados por no poder acceder a herramientas y archivos. En cambio, el tiempo es algo que jamás podrá recuperar: no se pueden «comprar» horas para recuperar esa cena con tus amistades o esa escapada con tu pareja que has dejado de hacer por tener que solucionar un imprevisto de última hora. Contar con un partner comprometido y especializado, se traduce en un tiempo de trabajo más productivo, menos horas desperdiciadas en superar dificultades en solitario y, en definitiva, un mejor ambiente laboral. Al fin y al cabo, el trabajo de los equipos TI de las empresas ya es de por sí lo suficientemente crítico como para hacerlo más «emocionante».
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