El Internet de las Cosas (IoT) está tocando a la puerta de muchas empresas; cada vez más equipos y personas trabajan en movilidad o desde delegaciones diferentes; muchas organizaciones han interiorizado ya que por coste y seguridad deben alojar sus herramientas y datos en la nube. La dependencia de las pymes respecto a la conectividad es total y los equipos TI lo viven todos los días.